sábado, 18 de enero de 2014

TRATAMIENTO PSICOLÓGICO EN EL CÁNCER.

Por desgracia, va en aumento la incidencia de pacientes con algún tipo de cáncer.
El estilo de afrontamiento y el nivel de adaptación del paciente ante el cáncer va a depender de diversos factores como puedan ser:

-Grado de patología a nivel clínico.
-Efectos de los tratamientos (cirugía, quimioterapia, radioterapia, etc.)
-Nivel de apoyo social, familiar y recursos ambientales.
-Competencia del paciente para hacer frente al estrés y la disponibilidad de tratamiento psicológico.

La investigación acerca de los tratamientos cognitivos-conductuales en cáncer, muestra consistentemente que dichas intervenciones siendo no superiores a 10 sesiones, aplicadas tras el diagnóstico de cáncer son altamente beneficiosas, tanto a corto plazo como a largo plazo para producir un afrontamiento positivo, que les lleva a reducir los problemas de ansiedad, depresión y mejorar su calidad de vida.
Las líneas de intervención psicológica en pacientes con cáncer son las siguientes:

-Información. Es muy importante que la información que se de al paciente sea la adecuada. Hay que tener en cuenta contenidos, tipos de información, vías a la hora de administrar la información al paciente y familiares, así como el momento y la secuencia más oportuna. Hay que adecuar la información al estilo de afrontamiento del paciente.
Algunos pacientes prefieren olvidar, negar o evitar la evidencia de la enfermedad. En este caso una información reiterada o exhaustiva puede ser negativo, mientras que otros prefieren buscar información, por lo que se les debe ayudar a obtenerla.
En todo caso, la información debe ser realista y hay que abstenerse de ofrecer panaceas, ni expectativas positivas infundadas. A veces, se puede tomar una actitud excesivamente positiva y no realista nada beneficiosa.

Hay que decir, que la información del diagnóstico o tratamientos a seguir, puede hacerle sentir al paciente mayor ansiedad inicialmente, pero a medio y largo plazo los pacientes informados y sus familiares logran desarrollar una mejor adaptación al proceso. Además, se puede acompañar de entrenamiento en estrategias para un mejor afrontamiento. La ausencia de información puede producir una mejor adaptación pero sólo a corto plazo.

-Intervención tras el diagnóstico del cáncer. Se busca como objetivo la adaptación al cáncer induciendo un estilo de afrontamiento positivo. Reducir la ansiedad, depresión y reacciones emocionales desadaptativas, promoviendo un sentido de control personal y participación activa, así como dotar al sujeto de estrategias para hacer frente al estrés y facilitar la comunicación del paciente con su pareja y su familia.
-Preparación para la hospitalización y los tratamientos, con el objeto de reducir la ansiedad y el impacto estresor que conlleva así como adquirir respuestas adaptativas a esta situación.

-Intervenciones y tratamiento asociado a la patología del cáncer o sus tratamientos médicos. Control de reacciones condicionadas y otros efectos asociados a la quimioterapia; ansiedad, náuseas y vómitos anticipatorios, control de la fatiga, cambios en el aspecto físico, dolor, anorexia, problemas sexuales, adaptación a amputaciones, etc.

-Intervenciones preventivas de cara a futuras recidivas, como eliminación de hábitos no saludables y adopción de hábitos beneficiosos para la salud.

-Intervención en la fase terminal. Con el objetivo de paliar el proceso los más posible tanto en el paciente como en sus familiares se trabaja para reducir la soledad y el aislamiento del paciente, aumentar su control sobre el entorno, reducir la apreciación de amenaza, disminuir la ansiedad y depresión, ayudar al manejo de sus propias emociones y asistir como soporte emocional.