Los
criterios con los que se forman las parejas han ido cambiando a lo largo de los
siglos. En la actualidad, las relaciones de pareja se construyen sobre las
bases de la intimidad, el compromiso y la pasión.
¿Pero
qué lugar ocupa y qué es el enamoramiento?. Desde un punto de vista psicológico
el enamoramiento es una emoción, y como tal, es una consecuencia de las
circunstancias propias y ajenas, y de la evaluación que hacemos de ellas, siendo
la pasión su máxima expresión.
Comportamientos
de la otra persona que sean valorados negativamente o que nos generen emociones negativas,
expectativas no cumplidas, la falta de refuerzo entre ambos, la falta de tiempo para la relación o la rutina con su
falta de novedad, pueden llevarnos a valorar a nuestra pareja, y a su vez
nuestra relación, de forma más negativa haciéndo que vaya despareciendo la
pasión y el enamoramiento.
El
enamoramiento, nos produce una gran excitación fisiológica que nos provoca
bienestar y nos dispone a no ver o disculpar, los defectos de la persona
amada, a sentir que la necesitamos, a
querer estar con ella en todo momento, a revelar aspectos íntimos, darle apoyo
emocional etc…pero si esto no se refuerza, tenderá a ir desapareciéndo con el
tiempo.
Autores
como Frijda, sostienen que una persona puede fácilmente enamorarse por una
serie de razones: soledad, necesidad sexual o insatisfacción, aburrimiento,
rutina o necesidad de cambios, falta de refuerzo, baja autoestima etc... Es
entonces, cuando un objeto despierta interés, por una serie de razones tales
como su novedad, su proximidad, su atractivo o las emociones que despierta. Esto
es lo que suele ocurrir en algunas personas con pareja, que de pronto se sienten
atraídas por otra persona o incluso creen estar enamoradas de ella.
El
enamoramiento o pasión se puede considerar el elemento que va a cimentar las
relaciones de pareja, pero hay que tener en cuenta que además de pasión, una
buena relación con un amor completo, es la que también conlleva intimidad y
compromiso, factores que a su vez inciden en el enamoramiento.
La
pasión, tiende a aparecer de forma rápida pero también se atenúa
velozmente, y es la que suele generar intimidad, y a su vez, pasión e intimidad, pueden generar compromiso. Además, el compromiso irá apareciendo poco a poco a medida que la
pareja vaya tomando decisiones de manera conjunta.
El sexo genera o implica cierta intimidad y su practica repetida con la
persona de la que estamos enamorados, potencia dicha intimidad de forma significativa. El
sexo es una gran aliado a la hora de reforzar una pareja. Sin embargo, las parejas que se forman basándose exclusivamente en una emoción como
la pasión pero en donde no aparece intimidad o compromiso, cuando aparece la
ley de la habituación y el placer de experimentar emociones nuevas va perdiendo
fuerza, la relación en la mayoría de las ocasiones está condenada al fracaso.
Hay que
tener claro que en una relación cuando la pasión ha disminuido, lo que queda es
algo más duradero como la intimidad o el compromiso. No obstante, hay que
intentar que ninguno de estos conceptos desaparezcan, ya que tanto la
intimidad, como la pasión o el compromiso, son los que harán que una relación
sea fuerte y duradera.
Cada día
acuden más a consulta, parejas que han perdido esa pasión y que no saben cómo
recuperarla. Son parejas donde hay intimidad y compromiso, pero que por el
desgaste del día a día o diferentes razones, han perdido la pasión o incluso ya
no se sienten enamoradas. A muchas de estas parejas les gustaría volver a
sentirse enamoradas.
En ocasiones, diferentes
técnicas pueden ayudar a que vuelva a parecer esa pasión, siempre teniendo en
cuenta que el resto de la relación no esté dañada o no haya otro tipo de problemáticas
que puedan estar influyendo en la pareja.
Algunos
ejercicios beneficiosos pueden ser:
-Los dos
miembros de la pareja se sentarán al final de la semana uno próximo al otro, y
tomándose un tiempo, se dirán uno al otro lo que le ha gustado de su pareja esa
semana.
-Cada
miembro elegirá un día de la semana para hacer algo especial por la otra
persona. No deben de coincidir los días. Se le comunicará al otro miembro de la
pareja que día será sorprendido gratamente y se trabajará para ello. Es mejor
si no se le sorprende con algún regalo material. Puede ser su comida favorita,
un masaje o realizar algo que al otro miembro le haga ilusión o que sepamos que
le agrade mucho.
-En el
caso de parejas con niños, cada quince días se buscará una tarde-noche,
para estar a solas con la pareja.
-Durante
las comidas y las cenas no se pondrá ni televisión ni radio ni se contestará a whatsapp. Se dedicara ese tiempo a preguntar a la pareja como le ha ido la mañana
o el día y a charlar.
-Se
buscarán actividades de ocio que se puedan realizar de manera conjunta y se
llevarán a acabo.
-Se
buscan dos cajitas, sobres o botes y cada miembro se queda con uno donde meterá
en 10 papelitos 10 pequeños deseos que la otra persona pueda hacer que se
cumplan. Luego se intercambian, para que cada miembro de la pareja cuando lo
crea conveniente, saqué un papelito y trabajé para que se cumpla el deseo que
hay escrito.
-Un día
a la semana se busca un momento no inferior a 30 minutos para abrazarse,
acariciarse, masajearse o simplemente estar tumbados sobre la cama relajados charlando.